domingo, 7 de agosto de 2011

To share or not to share


Los domingos son el día reflexivo por excelencia. Hoy toca un tema que me apasiona y del que además me ha llegado información por varias vías estos días. Como todos sabéis, conceptos como aprendizaje colaborativo y comunidades de práctica son de los favoritos en este blog. En esta ocasión hablamos de por qué compartimos y que nos aporta esta "conducta".
Hace unos días me encontré con este post de De la innovación y otros demonios "Somos en la red", que como siempre me sorprende aunque sólo tenga unas pocas líneas, me hizo pensar.... Como bien dice Raquel, vamos dejando "cachos" de nosotros mismos en la red, una parte de nosotros. Pero, ¿qué nos impulsa a hacer esto? ¿por qué compartimos en la red? ¿qué nos aporta? De todas estas dudas hablaba Roberto Carreras en su post ¿Por qué compartimos contenido en las redes sociales? En este post, que os recomiendo, se dicen cosas muy interesantes pero me gustaría destacar su cita al estudio The Psychology of sharing elaborado por The New York Times Customer Insight Group. Este estudio aporta datos concretos sobre algunas cosas que ya sabíamos o nos imaginábamos. Me gustaría destacar que:
  • El 73% de las personas que comparte en internet lo hace porque le ayuda a conectar con personas con intereses similares a los suyos.
  • El 69% comparte porque le hace sentirse más implicado con el mundo.
¿Hay mejor motivación que la de compartir para que compartan con nosotros? ¿Para formar parte de un todo? ¿Para sentirnos implicados y reconocidos?

Relacionada con la teoría de compartir surge esta tendencia llamada El sharismo de Isaac Mao. Para los que aún no lo conocéis os recomiendo su lectura, resulta muy interesante y revelador y viene a decir básicamente que los seres humanos compartimos por naturaleza, está en nuestros genes. La pregunta es ¿por qué nos cuesta tanto? ¿por qué nos empeñamos en ir en contra de nuestra biología? Increíble la frase de Mao,

"Cuanto menos compartes, menos poder tienes".

O lo que es lo mismo dicho en boca de nuestros amigos de Cuidando.es

"Lo importante no es saber, sino tener el twitter del que sabe"


Y para finalizar esta pequeña reflexión dominical os dejo con un fragmento del libro Conociendo el conocimiento de George Siemens.


"Estamos en el principio de un cambio espectacular, un cambio que agitará las estructuras y espacios de nuestra sociedad. Una multitud de cambios tumultuosos está dirigiendo el conocimiento, cimiento del mañana. Hasta ahora el conocimiento estaba al servicio de la economía: creación, producción y márketing. Ahora el conocimiento es la economía. Lo que antes era el medio, ahora es el fin."

6 comentarios:

  1. Hola Olga!
    Este tema me parece muy interesante porque resulta curioso que el que esta enredado, lo está "mucho" (se mueve mucho, busca buena info...); y el que no, pues pasa del todo. No hay terminos medios (o son minoría).
    He estado muchos años utilizado foros, antes que Twitter, facebook y blogger; y siempre que salia este tema a relucir se solía llegar a la conclusión de que es cuastión de ego (cuanto mas aporto, mas "karmas" o "aplausos" tengo... molo mas).
    Ahora no se que decirte, conozco mis razones, y de hecho no siempre son las mismas.
    En fin, que este tema me llama mucho la atención y que muchas gracias por rescatarlo.
    Feliz domingo!

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  2. Interesante reflexión de un tema actual y que va muy en la línea del 2.0:compartir,comentar...
    Personalmente lo que más me gusta de compartir en las redes es que dejas de ser un elemento pasivo a totalmente cyber activo donde tu eres dueño de tu propio aprendizaje. El intercambio de experiencias y tesoros que te vas encontrando son muy gratificantes.
    Un saludo Olga!

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  3. En relación a este tema, hace tiempo una profesora de referencia para mi, me contestó en base a las motivaciones por las que un profesional comienza a investigar que podían ser muchas: porque le apasiona, porque tiene algo de interés, porque esta empezando, por la carrera profesional, por la acreditación, porque lo hacen los demás, porque se lo dicen sus jefes.
    Al principio, las piedras solo son eso, piedras, después se pulen, y luego cogen forma, llegando a ser buenas obras.
    Por eso, compartir, independientemente de la motivación por la que se haga, es bueno no?
    Un abrazo!

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  4. Sin embargo, hay gente que no comparte salvo que sepa que puede conseguir algo a cambio. Era la forma de pensar imperante hasta hace pocos años, o incluso ahora, y aun se ve como unos raros o unos tontos a los que comparten sin mas, por el mero placer de compartir.

    Yo os animo a todos. Empecemos por algo sencillo, un ejercicio simple pero efectivo: ¿Has probado a compartir el croissant del desayuno? A veces funciona, jeje. ¿O es que nadie se acuerda de aquel anuncio de los Donettes con un chico que decía que cuando los compartía, le salían amigos de detrás de los arboles.

    Saludos!

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  5. Me quedo con la idea de compartir para implicarnos en el mundo, para construir otro mundo, que es posible aquí y ahora.

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  6. Gracias por vuestros comentarios. Por supuesto compartir implica un cambio de mentalidad importante, significa aceptar muchos retos, grandes y pequeños, pero la recompensa es tan grande...

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